Si en tu check list de orador, tienes estudiada la charla y gozas de seguridad para encararla, puedes preparar herramientas para amenizar el encuentro con tu auditorio. En este artículo, desarrollaremos por ejemplo: la musicalización en la oratoria.
Como principio recuerda el dicho popular: “el bien no hace ruido, el ruido no hace bien”.
Por ello, si con la música causas interferencias o puedes distorsionar el mensaje, búscate otra canción, otro artista, apela a temas instrumentales, o simplemente sírvete de otra técnica.
Se sugiere evitar la música de fondo durante la alocución, salvo que apeles a una anécdota o testimonial emotiva que requiera un “instrumental suave”. No abuses tampoco de esto, porque generarás rechazo.
Para el evento lleva tu propia música. No confíes en que el encargado de sonido dará play a tu versión preferida.
Los momentos ideales para musicalizar en oratoria, son los minutos previos al inicio de tu charla y el break o recreo. No dejes este recurso para el final o cierre, porque el auditorio estará más interesado en acercarse al orador y en retirarse de la sala.
Recurre a los hits mundiales y trans-generacionales, a los clásicos, a los artistas reconocidos mundialmente, a los temas populares. Ten presente que, las canciones son capaces de “tele-transportarnos” a lugares y momentos de vivencia personal, lo cual es tan bueno como malo si pretendes que se concentren en tu discurso.
Las canciones, sabores y aromas tienen la virtud de conectarnos con recuerdos, anécdotas, personas, lugares y experiencias, por lo que sería todo un logro que a tu oratoria puedan asociarla de ese modo.
SUGERENCIAS
¿QUIERES SUSPENSO E INTRIGA? Recibe a tu auditorio con música en volumen alto, tanto que les resulte difícil conversar entre ellos y queden expectantes al instante en el que tomes la palabra.
¿QUIERES UN AMBIENTE AMENO Y PROPICIO PARA EL NETWORKING? Musicaliza el break o recreo con éxitos musicales y mejor si éstos son en un idioma diferente al nativo, para que las letras no perturben la socialización entre los asistentes.
Lic. Guadalupe Ortellado.-